Escribir un texto con un lenguaje formal es mucho más fácil para los redactores. No es un misterio la razón: por lo general, la mayoría de los artículos que escribimos en el trabajo utilizan un lenguaje formal y profesional; estamos acostumbrados a él.
Después de leer varios textos que eran mucho más formales de lo que deberían ser y tener que adaptarlos sin reescribirlos, acabé descubriendo algunas técnicas y características del lenguaje informal para contenidos en Internet que pasan desapercibidas. ¡Aquí te comparto lo encontré!
No uses palabras rebuscadas
Evita aquellas palabras que no son muy usadas en el día a día de las personas – las famosas palabras difíciles. Por ejemplo: en vez de usar “subrepticiamente”, puedes usar “discretamente”, ¿no es así? Si, al releer el texto, encuentras términos rebuscados, procura cambiarlos por algo más simple.
Ojo con las formas verbales
A la hora de escribir, para que alguna cosa dentro de nuestra cabeza hace que se nos olviden las formas verbales más fáciles como “tener”, “hacer” y “usar”. Cuando redactamos, queremos sonar inteligentes y profesionales por lo que convertimos esas simples palabras en otras más “complejas” como “poseer”, “realizar” y “utilizar”, por ejemplo. Está claro que esos términos no están equivocados, pero cuando se trata de lenguaje informal, mientras más sencillo sea el texto, más fluida será la lectura.
Usa expresiones de interacción
Interactuar con el lector es siempre una buena forma de dar un tono más cercano al discurso. Por lo tanto, cuando el lenguaje del texto sea informal, se vale saludar al inicio o despedirse al final, dar ejemplos prácticos y hacer preguntas retóricas a lo largo del texto. ¡Experimenta y vas a ver una gran diferencia!
Adopta un tono más personal
Otra forma de aproximarse al lector y dar un tono más relajado es usar tácticas para que el texto sea más personal. Puedes hacer eso hablando en la 1ª persona del plural (o singular, cuando el pitch lo exija) y también refiriéndose directamente a la persona que está leyendo el texto.
Bromea un poco
La parte más divertida de escribir un texto con un lenguaje informal es que tienes la libertad de utilizar las palabras de maneras creativas y graciosas. Los toques de humor acostumbran ser bienvenidos en ese tipo de texto, igual que las expresiones populares – esas que “todo el mundo” identifica.
Pero ten cuidado con los chistes: no te olvides que la intención del texto es transmitir contenido. El mejor consejo aquí sería: usa el humor con una buena dosis de sentido común.
Juega con los subtítulos
Otra manera de hacer que el texto sea un poco más informal es jugar con los subtítulos. Huye de lo obvio e intenta usar algo más llamativo y diferente. El otro día, mientras editaba un texto sobre crioterapia (una técnica para atletas de alto nivel que consiste en quedarse por mucho tiempo en una bañera llena de gel para evitar lesiones), vi que uno los subtítulos decía “’¡Entrando en frío!”. Una elección bastante creativa, ¿no lo crees?
Entérate de lo que no puedes hacer
¡Escribir con lenguaje informal no significa que vas a tirar al santo por la ventana! Adoptar ese lenguaje es diferente a escribir como si estuvieras hablando con un amigo en la calle y las reglas tradicionales de ortografía y gramática todavía tienes que respetarlas.
Ten cuidado con los modismos y regionalismos: si tu texto va a estar en Internet, debe ser entendido por lectores de todas partes del mundo.
¿Viste cómo escribir un texto en lenguaje informal puede ser más fácil de lo que imaginabas? Mi mayor recomendación si estás teniendo dificultades es: escribe todo el texto y, a la hora de editarlo, repasa todos los puntos y haz modificaciones.
¿Te sirvió el artículo? ¡Cuéntanos en los comentarios cuáles son tus mayores dificultades con el lenguaje informal!