Análisis costo beneficio: por que este proceso es fundamental para los negocios

En nuestro post, entenderás de qué se trata el análisis costo beneficio y accederás a las etapas necesarias para desarrollarlo correctamente. ¡Aprende más con nosotros!

análisis costo beneficio

El análisis costo beneficio es una importante herramienta corporativa. Además de permitir analizar con riqueza de detalles cuán interesante es determinada alternativa para un negocio, posibilita identificar su potencial de efectividad frente a otras opciones.

En los diferentes sectores corporativos como Marketing, ventas y finanzas, considerar el impacto de costo ante los beneficios es una medida extremadamente relevante para identificar si tomamos en el timón y estamos orientando del barco hacia la mejor decisión.

Por lo tanto, el análisis costo beneficio interfiere en la toma de decisiones estimando el potencial de éxito de una estrategia y su nivel de impacto en las diversas esferas corporativas.

¿Te interesa conocer más sobre este fabuloso recurso de gestión?

Entonces, ¡continúa leyendo este post porque lo hemos elaborado especialmente para ti!

A continuación, entenderás de qué se trata el análisis costo beneficio, descubrirás por qué es tan relevante para los negocios y accederás a un paso a paso para llevarlo a cabo con seguridad y dirigiéndote hacia las decisiones más acertadas.

¿Tódo listo?

    ¿Qué es y por qué es tan relevante el análisis costo beneficio?

    Uno de los principales desafíos inherentes a la gestión consiste en tomar buenas decisiones.

    A menudo, optar por seguir un camino en vez de tomar otro implica la consideración de una serie de factores relevantes no solo para solucionar una situación específica, sino para la rentabilidad, el futuro y crecimiento de la organización.

    Básicamente, el análisis costo beneficio es un procedimiento que permite a los profesionales verificar de forma rápida, clara y acertada el nivel de éxito de un proyecto, actitud o acción detectando de esta manera si está yendo por el camino adecuado o es el momento de modificar su dirección.

    También conocido como Índice Neto de Rentabilidad, este análisis se lleva a cabo con la intención de medir el vínculo que existe entre los costos y los beneficios de una determinada decisión, proyecto o acción. Por lo que posibilita identificar si la inversión será, de hecho, efectiva y proporcionará un retorno financiero relativamente rápido.

    Para calcular este índice y analizar la eficiencia de una decisión en términos de rentabilidad necesitamos dividir el valor actual de los ingresos totales netos, también conocidos como beneficios netos, entre el valor actual de los costos totales o costos de inversión.

    O sea, B/C = VAN / VAC

    Como ves, este análisis implica el abordaje de muchas variables, entre las que destacamos:

    • Costos de operación como salarios y suministros;
    • costos de producción;
    • impuestos;
    • volumen de ventas;
    • financiamientos.

    Teniendo en cuenta los puntos supra, es nítido que elegir entre una u otra alternativa debe considerar el presupuesto disponible principalmente para asegurar el cumplimiento y el flujo correcto de las operaciones. 

    En este sentido, es importante que conozcas más sobre el universo de la gestión corporativa leyendo los siguientes artículos:

    5 ventajas del análisis costo beneficio

    En las próximas líneas, te brindamos una lista con las 5 principales ventajas de realizar este tipo de análisis:

    1. Evaluación basada en datos duros

    Cuando hacemos este tipo de análisis, aseguramos que nuestras decisiones se fundamenten en información fiable e insights fidedignos evitando de este modo, la incidencia de prejuicios u opiniones personales.

    2. Decisiones más simples

    Por lo general, las decisiones del área comercial suelen ser bastante complejas. Al analizar las situaciones bajo la óptica de los costos beneficios, podemos minimizar los errores de consideración, ser más racionales y desarrollar soluciones mucho más efectivas y ajustadas al momento.

    3. Descubres aspectos ocultos

    Como tenemos que detenernos a verificar los costos y los beneficios de un cierto proyecto, acción, decisión o estrategia, logramos entender ampliamente todos los factores que inciden en cada alternativa.

    4. Permite priorizar inversiones

    Si un proyecto o procedimiento presenta un costo muy alto, no proporciona los beneficios esperados pero el gestor cree oportuno desarrollarlo en algún momento, puede optar por dejarlo en standby priorizando otra opción menos costosa y potencialmente más rentable.

    5. Detectar la viabilidad de un proyecto

    Usualmente, al analizar los costos y beneficios de un determinado proyecto, vemos que no vale la pena ejecutarlo, pues no ofrece un buen retorno financiero o requiere una inversión fuera de la curva.

    Fíjate que entender si una acción o estrategia es válida considerando tanto los costos como los beneficios evita una gran cantidad de problemas e inconsistencias como integrar medidas que lleven el negocio a la bancarrota.

    Aprende a hacer un análisis costo beneficio siguiendo estos pasos

    En primer lugar, es importante recalcar que no existe una receta ideal para hacer un análisis costo beneficio, pues cada rubro, empresa o sector presentan sus particularidades y necesidades específicas.

    Sin embargo, existen ciertos aspectos que se comparten y deben considerarse como elementos centrales. ¡Conócelos!

    1. Define los estándares y un marco comparativo

    Si empiezas a analizar algo sin tener una referencia, probablemente terminarás confundido y sin una idea clara de cuál es el mejor camino.

    Así pues, antes de iniciar el análisis, estudia el tema relacionado con los objetos de la investigación y estima los parámetros.

    2. Clasifica los costos y los beneficios

    En este segundo punto, deberás clasificarlos según su tipología en:

    • Directos: relacionados con la producción del producto o servicio;
    • Indirectos: con naturaleza fija, derivan de los gastos generales de un sector;
    • Tangibles: medibles y cuantificables, se relacionan con un activo o fuente identificable como herramientas y alquiler;
    • Intangibles: son difíciles de identificar como los niveles productivos y la satisfacción del público;
    • Reales: asociados a la producción de una oferta, pueden ser los costos de materia prima y laborales. 

    3. Calcula los costos y beneficios

    Después de tener un marco de referencia, es hora de describir tanto los costos como los beneficios generales involucrados en la situación que estamos analizando. 

    4. Compara los costos y beneficios

    Ha llegado el momento de comparar estas dimensiones con sus referencias y sobre todo, considerar el tiempo necesario para que los beneficios paguen los costos, es decir, el retorno de la inversión o ROI.

    5. Verifica los resultados y has tus consideraciones finales

    Para emprender este último paso con seguridad, es posible que necesites hacer un análisis de sensibilidad con la intención de predecir los resultados y entender el grado de precisión de una medida ante las variables.

    Cuánta información valiosa, ¿verdad?

    Al llegar hasta aquí, esperamos que hayas entendido por qué es tan importante y cómo poner en marcha un análisis de costo beneficio de primera calidad.

    Sin dudas, al incorporarlo a tu rutina como gestor, verás grandes cambios en cuanto a generación de ingresos y rentabilidad. 

    Pero, para llevar la rentabilidad de un negocio al siguiente nivel, es imprescindible conocerlo a fondo principalmente en términos de objetivos y metas.

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