La escritura es una técnica antigua, pero la producción de contenido evoluciona a lo largo del tiempo. Y no hay duda que hoy, más que nunca, es una gran estrategia para atraer la atención de consumidores ávidos de información, productos y servicios. Pero, crear contenidos de calidad y estratégicos no es simple, y las empresas y marcas ya lo percibieron.
De acuerdo con la la mayor encuesta de Marketing de Contenido de Brasil llamada Content Trends 2017, el 71% de las empresas ya usan marketing de contenidos y el 29% que aún no adopta explicó que es por falta de tiempo o incluso de equipo disponible (38,9%), desconocimiento de la estrategia (31,8%) y falta de presupuesto (16,2%) como impedimentos para la práctica. La encuesta de este año mostró además que cerca del 68,9% de las empresas que no adoptan el Marketing de Contenidos tienen la pretensión de adoptar la estrategia
Para ayudar en la inspiración, la creatividad y la organización de la escritura, reunimos aquí algunos consejos para escribir bien. Si necesitas escribir un contenido diferenciado, sigue acompañando nuestro post.
Selecciona un tema
Antes de empezar a escribir, hay que pensar en lo que escribirás, es decir, la idea central del contenido y para quién será escrito. Define claramente sobre lo que vas a escribir, cuál es el objetivo del texto que será producido y cuál será el mejor enfoque para que el contenido realmente satisfaga las necesidades del lector.
Es interesante incluso crear una pauta para ayudar a guiar la escritura del texto. A partir de una pauta pre-elaborada, las ideas van a fluir mejor y consecuentemente el texto tendrá una mejor cadencia. La elección del tema y la creación de la agenda también serán fundamentales para decidir el mejor lenguaje que utilizarás en el texto, por ejemplo, si el texto será más formal o informal, más específico o más amplio.
Es importante recordar que si el objetivo del texto es resolver el problema de un consumidor, es importante que el tema esté directamente relacionado con la jornada de compra. Los temas más amplios deben ser escritos para el momento en que el consumidor está en búsqueda de información general sobre el tema y el aprendizaje. En un segundo momento de la jornada, el texto deberá centrarse en orientaciones para solucionar los problemas del consumidor. En la última fase de la jornada, los temas deben ser dirigidos a conquistar al consumidor que ya sabe del producto y servicio que necesita.
Crear una lista de temas
Después de tener una perspectiva amplia sobre el tema del texto que vas a escribir, es importante buscar más a fondo sobre este tema, para luego establecer una lista de temas a ser abordados en el contenido.
El contenido es tan importante como su formato. Por lo tanto, establece una lista de puntos a ser abordados acerca de aquel tema, organiza tu contenido y haz que sea mejor lo entendido posible por el lector.
La idea de crear estos temas, también conocidos como subtítulos, hará que tu escritura sea más fluida. Al escribir cada uno de estos temas, evita párrafos largos y utiliza correctamente la puntuación. La creación de los temas permitirá que tu texto sea mejor estructurado, facilitando la lectura principalmente de la redacción en la web. Esta organización de ideas es también conocida como escaneabilidad del texto.
Otra lista de subtópicos
Después de definir los temas, todavía deben dividirse en subtópicos. Se recomienda que los textos escritos para Internet sean formados por bloques, con pocos y cortos párrafos, para hacer al contenido más atractivo y la lectura más placentera. No basta con escribir un texto completo, lleno de insights e informaciones relevantes, si tu estructura no es capaz de conquistar la atención del lector.
Por lo tanto, además de los tópicos, es importante crear también los subtópicos, que dejan la lectura de tu texto más práctica, organizada y contribuye al entendimiento más eficaz de la información que quieres transmitir por medio de la escritura. Deshaz los temas en subtópicos y recuerda mantener la conexión entre ellos.
Revisa la estructura
Después de decidir temas, subtópicos y un promedio de párrafos a escribir en cada uno de ellos, revisa tu elección en relación con la estructura del texto. Analiza tu decisión sobre la arquitectura del texto y confirma que el orden es lógico antes de empezar a desarrollar cada uno de estos puntos.
Esta estructura debe estar directamente ligada a la persona que tu texto deberá alcanzar. Piensa en cómo las palabras y las ideas pueden ser expuestas para conquistar a tu lector y hacer que el contenido sea realmente eficiente y obtenga los resultados esperados de acuerdo a tu estrategia.
Comienza a desarrollar el texto
Ahora sí es el momento de empezar a escribir. Si los pasos anteriores se realizan con éxito, seguramente la escritura se beneficiará. Esto porque, escribir no es más que organizar la secuencia de las ideas sobre un determinado tema. Y la estructura ya definida, es decir, la información preestablecidas orientará el proceso de la escritura.
Recuerda que el momento de la escritura debe concentrarse todo el tiempo en el tema y en la persona para la cual tu texto será dirigdo. Lo importante es tener esa persona en mente para reproducir en la escritura, la forma en que hablas con ella sobre el tema o presentas las ideas y argumentos acerca del tema.
Sigue las reglas gramaticales y ortográficas, establece cohesión y coherencia y también prepárate física y mentalmente para el momento de la escritura. Es importante estar en un ambiente y con tiempo adecuados para la práctica.
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Evita adjetivos, adverbios y no repitas palabras
Describir objetos y situaciones es importante para informar a tu lector, pero para construir una buena narrativa, no debes abusar del uso de adjetivos y adverbios. Después de escribir, revisa el texto tantas veces como sea necesario y busca eliminar palabras como muy, mucho, quizá, realmente, verdaderamente, entre otras.
La revisión sirve también para la cazar errores de ortografía, de gramática, de puntuación y de repetición de palabras. El buen escritor debe leer mucho. Los libros, revistas, artículos, sitio de noticias, periódicos son instrumentos importantes de lectura y responsables por elucidar ideas ayudando en la narrativa de historias y en la ampliación del vocabulario.
El uso excesivo de palabras repetidas es un gran error y puede empobrecer el contenido. Por lo tanto, busca sinónimos y diversifica al máximo las palabras de tu texto. El idioma español es muy amplio y debe ser aprovechado.
Ten un comienzo y un final contundente
Todo texto necesita una introducción capaz de cautivar al lector y sostener su atención hacia lo que está por venir. Pero recuerda, no hagas ninguna promesa al principio del texto que no te cumplirás. La introducción es la base de una idea fuerte, plantea un problema del lector, por ejemplo, y sostiene esta idea con datos, investigaciones e información relevante del mercado. La introducción también puede resumir lo que se abordará en el transcurso del texto.
La conclusión debe dar la respuesta final al problema planteado en la introducción y explicado en el transcurso del contenido. Al final del texto es importante aún utilizar un Call-to-Action, es decir, una invitación para alguna acción, sea leer más sobre el tema en otro contenido, descargar un e-book o incluso compartir tu artículo en las redes sociales
¿Y a ti? ¿Te gustó nuestros consejos para escribir bien? Deja tu comentario sobre tu experiencia con la escritura.