Y es que, bien implementado, el marketing directo puede ayudar a las marcas a atraer nuevos clientes y/o fidelizar a los actuales, brindándoles información verdaderamente relevante para ellos. Sin embargo el peligro de convertirse en spam es alto, por lo que es necesario generar una buena estrategia que garantice el éxito.
Pero empecemos por el principio...
¿Qué es el marketing directo?
El marketing directo es aquel que le habla directamente a un grupo particular de personas. Su objetivo es generar una acción, por ejemplo: que realicen una compra, que ingresen a un sitio, que llamen a algún número para recibir información, o que llenen un formulario.
Este tipo de marketing exige una muy buena segmentación para así poder llegarle a las personas que puedan estar realmente interesadas y ofrecerles información valiosa. De lo contrario podemos llegar a ser intrusivos y generar una imagen perjudicial para nuestra marca.
Tipos de marketing directo
Podemos calificar el marketing directo como cualquier acción que esté dirigida a un segmento específico y que busque una respuesta o acción de su parte. Los tipos más frecuentes de marketing directo son:
Tradicionales:
- Correo directo (incluye souvenirs, brochures, catálogos, folletos, postales, etc.)
- Cupones o bonos de regalo
- Volantes (flyers)
- Telemarketing (llamadas)
- Infomerciales o televentas
Digitales:
- Mensajes SMS o por WhatsApp
- Emails
- Newsletters
- Pauta online dirigida (como las que encuentras en Facebook)
Ventajas del marketing directo
- Es personalizable: Ya que el marketing directo se basa en la información de tu público objetivo, puedes diseñar mensajes personalizados a partir de sus características. Eso ayudará a aumentar la efectividad.
- Es medible: Al requerir una respuesta o acción, puedes medir el éxito de tu campaña y tomar decisiones con base en esa información. En ese sentido el marketing directo es muy distinto al masivo, cuyo impacto es bastante difícil de medir.
- Es interactivo: El marketing directo busca despertar una reacción en las personas, generando un diálogo con la marca.
- Permite fidelizar: Puedes enviarle información de interés a tus clientes (como newsletters), la cual ayudará a mantener y fortalecer el vínculo con ellos .
- Permite atraer clientes: Una buena base de datos te permitirá identificar a las personas que podrían estar interesadas en tu oferta y comunicarte directamente con ellas.
- Tiene una buena relación costo-beneficio: La efectividad de este tipo de marketing radica en seleccionar adecuadamente el target. Si lo haces bien, tendrás un muy buen retorno de la inversión con un presupuesto relativamente pequeño.
Pasos para hacer una estrategia de marketing directo
1. Define tus objetivos
Primero lo primero. Establece qué quieres lograr y si el marketing directo es la forma correcta de alcanzarlo. Define objetivos reales y medibles y determina con qué recursos cuentas para lograrlos.
2. Basa tu estrategia en información de calidad
Lo ideal es contar con una buena base de datos que tenga información completa y actualizada sobre cada individuo. Define el segmento al que te dirigirás a partir de tus objetivos. Recuerda: ¡No le envíes el mismo mensaje a todo el mundo!
3. Elige los canales
Analiza cuáles son las mejores formas de llegarle a ese público objetivo que elegiste. Ojo, ¡evita tomar esa decisión a partir de tus creencias personales! Mejor, básate en los datos. Define si vas a emplear uno o más canales para comunicarte con ellos.
4. Ponle creatividad
No te quedes con la primera idea que se te ocurra. Usa la información que ya tienes sobre tu público para identificar maneras innovadoras de despertar su interés. Si quieres puedes buscar ejemplos originales en internet, como esta compilación de casos creativos.
5. Mide
Mide el índice de respuesta que tuvo tu campaña. ¿Cuántas personas llamaron? ¿Cuántas ingresaron a tu sitio? o ¿Cuántas redimieron cupones?
6. Toma decisiones
Analiza la información y toma decisiones que te ayuden a perfeccionar tu estrategia.
Qué tener en cuenta al hacer marketing directo
- Lo ideal es que utilices varios canales para hacer llegar tu mensaje. Eso sí, recuerda seleccionar los más afines a tu público, ya que no se trata de saturar a la gente.
- Brinda información útil y/o ofertas relevantes. Evita a toda costa convertirte en una fuente de spam.
- Siempre, SIEMPRE, incluye un llamado a la acción. Sé que es sentido común, pero no está de más recordarlo (a veces nos dedicamos tanto a la creatividad que nos olvidamos de los objetivos).
- Recuerda que siempre debe haber una manera de monitorear las respuestas y medir la efectividad, sin importar si tu campaña es digital o no.
- Destácate del montón. Como dije al principio, todos los días somos receptores de marketing directo, y solo algunos mensajes logran un verdadero impacto.
Terminemos con un buen ejemplo de marketing directo
Ya que la creatividad es uno de los insumos más importantes con los que puedes contar para desarrollar tu estrategia de marketing directo, quiero terminar con este caso de Toyota Corolla. Esta marca hizo uso del ingenio y la tecnología para anunciar la llegada del nuevo modelo a través de una pieza memorable y de gran impacto. Tanto, que aumentó el tráfico al sitio de Corolla en un 257%. Mira aquí el caso completo:
Espero que este artículo te haya servido para comprender mejor el marketing directo y que te haya dado algunas ideas que puedas aplicar. ¡Nos leemos luego!