Alcanzar una buena clasificación en Google y en otros motores de búsqueda es muy importante para quienes invierten en SEO. Al fin y al cabo, el tráfico orgánico derivado de estos canales es vital para una estrategia en línea exitosa.
Pero una pregunta que ronda en la cabeza de muchos profesionales del Marketing Digital es: ¿la tasa de rebote o bounce rate afecta o no la posición de una página web en los rankings de Google?
Para responder a esta pregunta de una vez por todas, echemos un vistazo profundo a cómo la tasa de rebote puede afectar tu negocio, acaparando cada uno de los siguientes temas:
¿Qué es el bounce rate?
Bounce rate es la tasa de rebote, es decir, cuando una persona accede a un sitio web y luego lo abandona sin interactuar ni interesarse por ninguna otra página.
Esta salida puede ocurrir de varias maneras. Los usuarios:
- hicieron clic en el botón "Atrás" en el navegador;
- cerraron la página/pestaña;
- estaban vinculados a otro sitio —dentro de tu propia página;
- ingresaron a una nueva dirección;
- o simplemente han estado inactivos durante un determinado período de tiempo (30 minutos, siguiendo el estándar de Google Analytics).
Recordando que el cálculo de esta métrica se realiza dividiendo las sesiones de una sola página entre todas las sesiones.
¿La tasa de rebote es lo mismo que la tasa de salida?
Es muy común que exista una confusión con estos conceptos, pero es importante tener en cuenta que son términos muy diferentes.
Mientras que la tasa de rebote, como decíamos antes, muestra cuántos visitantes han entrado y salido de una página, sin ninguna interacción, la tasa de salida indica cuántos visitantes han salido de una cierta página.
De este modo, la tasa de rebote se vincula con la página de destino. Por otro lado, la tasa de salida, como su nombre lo indica, se relaciona con la página donde el visitante abandona el blog o sitio web.
¿La alta tasa de rebote es un problema?
Por lo general, la idea de la tasa de rebote es negativa, especialmente para los sitios centrados en el contenido. Al final, cuanto mayor sea la tasa de rebote, menor será la interacción con los materiales producidos.
Como esto va en contra de lo que Google quiere para las páginas que posiciona en los primeros lugares, surge la pregunta que hemos planteado al principio del artículo.
Hay una serie de factores que pueden contribuir a una alta tasa de rebote, desde la falta de una sólida planificación de contenido, un diseño deficiente, la falta de enlaces, etc.
Sin embargo, siempre es bueno recordar que no todas las páginas son iguales. Mientras que algunas están diseñadas para recibir un alto volumen de interacciones, otras no necesitan priorizar este aspecto.
Por ejemplo, comparando un artículo con una página de contacto, el artículo tiene una “mayor responsabilidad” de orientar el visitante hacia otras páginas del sitio.
Por otro lado, la página de contacto se enfoca en brindar información de cómo comunicarse con el visitante y la persona no necesita interactuar más o ir a otra página después de eso.
Además, según una investigación de QuickSprout, si una tasa de rebote es alta o baja puede depender de otros factores, como: mercado, objetivo del sitio web, objetivo de la página, etc.
Sin embargo, existen algunos números promedio de acuerdo con el tipo de sitio. Fíjate los valores que generalmente se encuentran en los principales mercados:
- minorista — 20 a 40%
- páginas de destino simples — 70 a 90%
- portales (ejemplo: MSN, Yahoo!) — 10 a 30%
- sitios de servicio/ Preguntas frecuentes — 10 a 30 %
- venta de servicios (generación de leads) — 30 a 50%
- sitios de contenido — 40 a 60%
- blogs — 70 a 98%
Con puntos válidos en ambos lados de la discusión, ¿cómo sabemos si la tasa de rebote realmente afecta tus clasificaciones? ¡Esto es lo que descubriremos en el siguiente apartado!
¿El bounce rate hace alguna diferencia en tus rankings de Google?
Ante una duda tan significativa, nada mejor que consultar a los responsables de este análisis, ¿no te parece?
Teniendo en cuenta lo que dice Google sobre el tema, la respuesta es que ¡la tasa de rebote no afecta tu posición en los rankings de búsqueda!
¿Te sorprendió la respuesta? Sí, pero hay razones válidas detrás de esta afirmación que aclaran el tema satisfactoriamente:
No todo el mundo usa Google Analytics
Solo las páginas que tienen el código de Google Analytics pueden capturar sus tasas de rebote. Como no todos los sitios usan Analytics, esta métrica no se usa.
Pero claro, este no es el único factor que impide el uso de la tasa de rebote como un criterio de evaluación, ¡ni es el más importante!
En definitiva, si este fuera realmente un punto importante para Google, el motor encontraría una manera de incluirlo en la evaluación, ¿verdad?
El tiempo de visita es un indicador demasiado amplio
El segundo motivo es que el tiempo de visita al sitio web es un indicador poco efectivo. Aunque esta información estuviera disponible para el 100% de los sitios analizados, ¿cómo determinar la experiencia real que tuvo el visitante?
Inclusive, la propia compañía lo tiene en cuenta a la hora de hablar de la tasa de rebote en su web oficial:
Los usuarios también pueden abandonar el sitio después de ver apenas una página si han encontrado la información que buscan allí y no están interesados en acceder a otras páginas.
Un visitante puede pasar 10 minutos en tu página porque está leyendo y releyendo el contenido o porque empezó a prestar atención a otra actividad e incluso, olvidó lo que estaba haciendo.
¿Cómo la tasa de rebote afecta a tu sitio?
En la mayoría de los casos, ver a los visitantes abandonar tu sitio en la primera página no es algo bueno.
Ante este escenario, es muy importante entender cómo la tasa de rebote puede ser perjudicial para tu estrategia digital.
A continuación, te brindamos una lista con 3 formas de una alta tasa de rebote afectar tu sitio web:
Dificultad para retener a los visitantes
Hoy en día, tener éxito en internet es un privilegio exclusivo de quienes logran atraer y estrechar poco a poco su relación con el público.
Si tu web ocupa un lugar destacado en Google, probablemente estás logrando la primera parte: atraer personas al sitio.
Sin embargo, el problema es que con una alta tasa de rebote, es casi imposible retener a los visitantes. ¿Cómo estas personas van a interesarse por los contenidos que produces y por tus soluciones si ni siquiera pasan de la primera página a la que acceden?
De esta manera, la prioridad debe ser identificar qué está causando que la audiencia pierda su interés por los mensajes y corregir estos problemas rápidamente para mantenerla en tu sitio por más tiempo.
Esfuerzo considerablemente mayor para alcanzar los objetivos
Independientemente de tu nicho de mercado o estrategia de marketing, necesitas tener un propósito bien definido para tu sitio web.
Ya sea que este objetivo defina que el público lea tu blog regularmente, se suscriba a un boletín informativo, descargue material gratuito o realice una compra, para que se cumpla, la tasa de rebote debe ser baja.
Al final, cualquiera de estas acciones que mencionamos requiere interacción, clics, búsquedas, etc. Por tanto, podemos decir que cada rechazo es una oportunidad que se pierde en términos de conversión.
Cuanto mayor sea la tasa de rebote de tus páginas, mayor será el esfuerzo necesario para lograr tus objetivos.
Mayor inversión en anuncios
Si inviertes en enlaces patrocinados, sabes que también existe un ranking para garantizar que los anuncios más relevantes aparezcan de manera destacada.
Algo que se tiene en cuenta para esto es la calidad de la experiencia en las landing pages, es decir, qué tan relevante es tu página para quienes hacen clic en el anuncio.
Si la mayoría de las personas que hacen clic en tu anuncio abandonan el sitio sin interactuar con ninguna de sus páginas, es una señal de que no han encontrado lo que buscaban.
Todo esto entra en el cálculo de Ads, que define el nivel de calidad de tu anuncio. Cuanto menor sea la calidad, más caro será el costo por clic.
Básicamente, esto significa que, si bien no afecta tu clasificación en Google, un alto bounce rate puede significar grandes problemas para el éxito de tu estrategia de marketing.
Debido a esto, es importante continuar monitoreando de cerca esta métrica y usarla para optimizar puntos específicos en tus páginas.
¿Qué puedo hacer para disminuir el bounce rate?
Ahora que conoces más detalles acerca de esta métrica, es hora de hablar sobre las medidas más efectivas para disminuirla.
Siempre le “piso los talones” a mis clientes en todos los análisis de resultados donde la tasa de rebote es alta. Siempre repito: “¡necesitamos trabajar en los enlaces internos e incluir CTAs en cada artículo!”
Estas dos formas son muy eficientes para hacer que el visitante interactúe en una página. En las próximas líneas, las analizamos y presentamos otras maneras igualmente interesantes de promover la conexión entre los sitios y sus visitantes.
1. Piensa en la experiencia del usuario
Puedes tener un artículo en tu blog con contenido rico en información. Sin embargo, si no es fácil de usar, es probable que la audiencia abandone la página sin siquiera comenzar a leerlo.
Evita artículos sin formato con grandes bloques de texto, sin subtítulos, imágenes y viñetas. Además, elimina el exceso de banners y ventanas emergentes.
Invierte en la escaneabilidad de tu texto y facilita su lectura. Necesitas organizar la información para que el visitante tome el mejor camino y entienda tu mensaje.
2. Inserta CTAs eficientes
Si tus páginas tienen una llamada a la acción o CTA eficiente, que atraiga la atención de los visitantes, estos interactuarán más y, en consecuencia, la tasa de rebote disminuirá.
Puedes usar CTAs para ofrecer materiales ricos —como siempre recomiendo a mis clientes—, una suscripción a un boletín informativo o incluso, una conversación con un experto.
3. No abuses de las ventanas emergentes
Sabemos que las ventanas emergentes o pop-ups son excelentes para la conversión — aquí en Rock siempre las usamos en nuestros blogs y en el sitio web.
Pero debes tener cuidado de no hacer que tu página parezca un correo no deseado o un virus.
Demasiadas ventanas emergentes pueden dificultar la navegación e interrumpir la lectura del visitante, lo que afecta negativamente su experiencia con tus contenidos.
4. Inserta siempre enlaces internos
Cuando escribes un contenido y ya existe otro artículo relacionado con su tema central en tu sitio web o blog, inserta un enlace entre ellos, ¡como acabamos de hacer!
De esta manera, ofreces aún más información al visitante y lo haces interactuar con tu sitio de forma fluída.
5. Crea llamadas atractivas
No dejes tu sitio web o blog configurado para mostrar demasiada información en la página principal.
Si se trata de un artículo, inserta un título atractivo, un resumen y un punto como "leer más". Así, el visitante elegirá lo que más le interese e ingresará a esta página.
6. Vigila la velocidad de carga
Cuando una página tarda mucho en cargarse, es probable que el visitante la abandone.
En este sentido, es importante hacer hincapié en que puedes perderte una visita a un competidor por 2 segundos. Hay varias herramientas para ayudar a medir este tiempo, como PageSpeed, por ejemplo.
7. Cuenta con contenidos adaptables a dispositivos móviles
Actualmente, es cada vez más común que las personas accedan a sitios web y blogs a través de sus dispositivos móviles.
Si tu sitio no está preparado para adaptarse a móviles, el visitante encontrará la información desorganizada y es muy probable que no quiera interactuar con las páginas.
De hecho, es muy amplia la lista de mejores prácticas para disminuir el bounce rate y siempre está creciendo, en definitiva, el algoritmo de Google se actualiza constantemente. Por lo que siempre debemos estar atentos y centrarnos en la experiencia del visitante.
Ponte en el lugar del visitante y piensa: “si estuviera visitando esta página por primera vez, ¿tendría motivos para interactuar?”.
¿Te gustó entender cómo funciona el bounce rate y cómo puede afectar el éxito de tus páginas? ¡Sigue aprendiendo echando un vistazo a nuestra guía completa para escribir blogs corporativos exitosos!
