Cualquier experto en Marketing Digital y SEO tiene como objetivo primordial lograr posicionar sus sitios en Google para llegar a los ojos de todos los usuarios que buscan en el motor de búsqueda una solución a su duda, problema o dolor.
Sin embargo, ¿qué pasa cuando no queremos que una URL nuestro aparezca allí? Pues, esto es posible al desindexar el sitio web y en este post te contaremos cómo hacerlo, en qué casos es necesario realizar esta acción y qué consecuencias tiene.
Ahora bien, quizás te estés preguntando por qué una persona u organización querría desindexar una página web de su dominio ante los ojos de Google u otras SERP. Pero, la desindexación muchas veces es una práctica importante para mejorar la estrategia de Marketing de Contenidos o para ofrecerle una mejor experiencia al usuario.
A continuación, te explicaremos todo desde el principio para que aprendas a qué se refiere esta práctica, sus usos, consecuencias y un paso a paso de cómo realizarlo correctamente.
¿Listo? ¡Lee hasta el final!
¿Qué es desindexar una página?
La indexación aplicada al SEO se refiere a la práctica de permitir que una URL aparezca en los resultados de los motores de búsqueda, es decir, que esté dentro del índice de Google.
En términos más simples, es la forma como disponibilizas una página web para que los motores de búsqueda puedan encontrarla, acceder a ella y analizarla para determinar su relevancia en relación con las intenciones de búsqueda de los usuarios.
Pues, desindexar es la acción contraria, es decir, aplicarle una serie de protocolos —de los que te hablaremos más adelante— para que GoogleBot no rastree la URL.
¿Cuáles son los efectos en el SEO al desindexar una URL?
Ahora bien, aclarado el punto central de este blogpost, surgen muchas preguntas. Por ejemplo: «¿Esto no es perjudicial para el tráfico de un sitio web?» «¿Desindexar reducirá mis ventas?». Pues, sí y no.
Al desindexar le estamos diciendo a los motores de búsqueda que no tienen que considerar una página en nuestro sitio web para los resultados y esto puede que en un principio genere un bajón en el tráfico mensual al que estamos habituados.
Asimismo, si analizamos un poco el algoritmo de Google en cuanto a la desindexación, podremos observar que toma en cuenta el tráfico de una URL para "confiar" en otra del mismo sitio. Por lo que, si generamos una desindexación aleatoria, podremos afectar las sesiones, ventas o la temporalidad del tráfico.
Sin embargo, este proceso no puede realizarse al azar y existen prácticas que convierten esta acción en una actividad estratégica para generar mejores resultados de negocios. ¿Quieres conocerlas? ¡Sigue leyendo!
¿En qué casos esta acción es necesaria?
Los motivos de hacer esto pueden ser muy diversos y van desde eliminar páginas que no cumplen con los estándares de calidad de la organización, hasta "borrarlas" para poder generar otros que estén más actualizados con las condiciones actuales.
Por ello, separaremos por casos los escenarios donde el desindexar puede llegar a convertirse en una práctica beneficiosa y productiva para el blog, sitio web o ecommerce de una persona o empresa.
Thin content
Muchas veces en los blogs —sobre todo al inicio— publican materiales que no cumplen con la misión de agregar valor o solucionar un problema del usuario. El denominado thin content habla de contenidos de poca calidad o "planos".
Pues, si tenemos una URL indexada que es pobre en su forma y su fondo, Google y otros motores entenderán que tu sitio no ayuda al visitante y por lo tanto te relegará más y más cada vez.
Duplicados
La duplicación de contenido no tiene que significar plagio, de hecho, existen casos en donde la duplicación ocurre dentro de un mismo sitio web. Pero, sea cual sea el motivo de este evento, Google no lo ve con buenos ojos.
Más allá de la realidad en donde un contenido duplicado —interno o externo— recibe penalizaciones por los motores de búsqueda, cualquier tipo de duplicidad no le brindará beneficios al SEO de tu web, por lo que la desindexación en este caso está completamente justificada y recomendada.
Si bien podrías personalizar estos contenidos para distanciarlos en sustancia de otros que se le parezcan, es necesario evaluar si el resultado final de esta modificación será relevante para el SEO.
Asimismo, se podrían utilizar las llamadas canonicals que permiten "redirigir la mirada" de Google a ciertas partes del contenido para evitar que analice las partes duplicadas. Pero, al igual como lo mencionamos en el párrafo anterior, sería necesario determinar si el fin justifica los medios.
Crawling
Una de las razones más habituales de la desindexación es precisamente para favorecer al crawling, es decir, el rastreo de páginas.
El presupuesto de rastreo o crawl budget de una organización es un elemento finito y que debe ser optimizado para favorecer la estrategia SEO.
Si reducimos o eliminamos el crawling en ciertas URL de nuestro sitio que no son relevantes para los resultados de la empresa, podremos eficientar el uso del capital y la atención de Google para que se centre en aquellos que sí producirán rentabilidad o mejorarán nuestros indicadores.
Si sabes un poco de SEO, sabrás que una vez que los crawlers entran en un sitio rastrean todo el contenido, sí y solo sí, no le indicamos lo contrario. Pues, es necesario estar preparado para ello y estructurarles el paso para que reconozcan solo lo que le interesa a tu estrategia.
Canibalización
Cuando dos o más URL de un mismo sitio "pelean" entre sí para ganar una sola intención de búsqueda o palabra clave, eso se denomina canibalización y es un problema que la desindexación puede resolver.
No obstante, no es la única alternativa que existe, pero si los contenidos son antiguos o generan serios problemas de posicionamiento para tu web, el desindexar puede ser la mejor solución para beneficiar al mejor de ellos.
Si has llegado hasta aquí es muy posible que hayas reconocido que esta práctica, bajo las condiciones correctas, puede ser una acción estratégica para favorecer a tu SEO y a tus esfuerzos en Marketing de Contenidos, ¿cierto?
Pues, ahora te diremos cómo llevarlo a la realidad.
¿Cómo desindexar una página en Google?
Cuando tomas la decisión de empezar el trabajo de desindexación existen varias formas de ejecutarlo. A continuación, te mostramos algunas de las más recurrentes o habituales en el mundo SEO.
Meta Robots Tags
Este tipo de etiqueta permite que Google reconozca lo que debe hacer con esa URL, pues esta esta HTML tag dentro del sitio en cuestión, contiene el código para dar órdenes que pueden ser:
- Index, follow: para indexar y los enlaces deben ser seguidos por crawlers.
- Noindex, follow: no se debe indexar y los enlaces deben ser seguidos.
- Noindex, nofollow: no se debe indexar y los enlaces no deben ser seguidos.
- Index, nofollow: se debe indexar y los enlaces no deben ser seguidos.
Por lo que, de acuerdo con el contenido, se le indicará a Google lo que debe hacer con esa URL y, si se quiere desindexar, cualquiera de las dos de en medio serían las adecuadas.
A través de robots.txt
Otra forma es usar el código robots.txt que está dentro de la URL que usan los motores para poder rastrear el sitio y conocer su contenido, para indicarle a Google que se desea desindexar esa página.
A través del comando «Disallow» se le dirá a los Googlebots que no ingresen a una URL en concreto o directorio en particular.
Al no tener acceso a dicho sitio y no poder ejecutar el rastreo de su contenido, no se indexará en la gran mayoría de los casos, solo con algunas excepciones.
Apoyándote de Google Seach Console
Otra forma es usando la herramienta Google Seach Console, que puede ser el método más recomendado para ejecutarlo.
Google ha habilitado una funcionalidad en Seach Console para eliminar las URL en el apartado de «Índice» en la opción «Retirada de URL» en el lado izquierdo de la pantalla. Una vez allí, se debe hacer clic en el menú y se abrirá otra pantalla donde se visualizan claramente tres pestañas.
Las pestañas son: «Retiradas temporales», «Contenido obsoleto» y, «Filtro búsqueda segura». Presionamos en la primera y tendremos un cuadro donde podremos hacer una solicitud para retirar específicamente una URL o las que cuenten con un prefijo determinado.
Ahora bien, hay que tener en cuenta que una vez completada la solicitud de retirada de una URL, el sitio estará desindexado durante 6 meses. Luego de ello, Google lo volverá a indexar si los crawlers lo rastrean para una palabra clave o intención de búsqueda.
Asimismo, existen otros métodos como lo son:
- Code 404: el servidor devolverá un código 404 a Google, diciéndole que el URL ya no existe.
- Code 410: el servidor le dirá a Google que el URL "se ha ido" indefinidamente, lo cual es una mejor práctica de SEO.
- Bloqueo con contraseña: al no poder entrar, Google entenderá que es no indexable.
Es importante aclarar que la desindexación es un proceso que puede generar buenos resultados, siempre y cuando se elabore una estrategia de valoración de contenidos y posicionamiento que determine que algunas URL están causando problemas en lugar de beneficios.
Por ello, el desindexar es una acción que resulta de múltiples análisis y estudios de funcionamiento, operatividad y productividad de tu sitio y si se llega a la conclusión de que algunas URL deben salir de tu página, se deben tomar las decisiones más adecuadas para favorecer el SEO en lugar de perjudicarlo.
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